«Queremos ser el equipo de Barcelona, Cataluña y España y que sintamos que el público nos da muchos ánimos gritándonos ¡Vamos, vamos!» , afirma Grant Dalton, CEO de Emirates Team New Zealand, defensor de la 37º Copa América y principal artífice de que la competición se realice el próximo año en aguas de la capital catalana. Dalton y el resto del equipo han abierto este lunes a la prensa su nueva base en el puerto barcelonés, justo en el tercer día que ya entrenan por el campo de regatas y después de haber compartido navegación con las embarcaciones clásicas de la regata Puig que este domingo finalizó en Barcelona. Setenta personas, la mitad de todo el equipo neozelandés ya está instalado en Barcelona y el resto vendrá en octubre para conocer las condiciones en las que el año próximo disputarán la reválida del trofeo que ostentan. Además de conocer las instalaciones en el Puerto barcelonés, como el completo gimnasio en el que entrenan sobre todo los «ciclistas», miembros del equipo kiwi que son necesarios por desarrollar una notable potencia de piernas. A los neozelandeses se les conoce con el apelativo kiwi, el mismo nombre del ave sin alas que es una especie endémica de las islas. Junto al monumento de Colón también se encuentra una diáfana oficina con los ingenieros, desarrolladores de programas, mecatrónica, hidráulica, etcétera. Profesionales que crean sus propias herramientas de software para resolver los problemas de diseño, subraya Roger Frigola, ingeniero del equipo neozelandés que es el único español del equipo. Frigola es un experto en «machine learning» e inteligencia artificial con más de 15 años de experiencia en Fórmula 1 y la Copa América, donde es su tercera campaña con el equipo. El equipo montó en tierra la embarcación con la ayuda de una grúa, tarea que realizan a diario dos veces (montaje y desmontaje) porque nunca la dejan pernoctar en el agua. El palo pesa unos 300 kilos y la embarcación, en este caso un AC75 mientras esperan que llegue por barco procedente de Auckland un AC40, monocasco volador, pesa en total 5.500 kilos, una tonelada menos que la nave de la anterior Copa América. La reducción del peso se debe a la ingeniería y también a pasar el equipo de once a ocho personas y el objetivo es siempre ganar más velocidad. No obstante, construirán una tercera embarcación ex novo especialmente diseñada para competir en las aguas barcelonesas. El espacioso hangar tiene una composición de contenedores-talleres para facilitar su traslado rápido y se espera que próximamente lleguen hasta ocho contenedores-taller más. La prensa ha podido presenciar de primera mano una sesión de entrenamiento en su preparación para defender su título, con la participación de Grant Dalton, CEO de America's Cup Event Barcelona (ACE Barcelona) y de Emirates Team New Zealand; Kevin Shoebridge, COO de Emirates Team New Zealand; Pete Burling y Nathan Outteridge, timoneles de Emirates Team New Zealand, y los diseñadores Elise Beavis y Roger Frigola, entre otros.

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