El navegante y empresario Stephan Kandler, director general del Orient Express Racing, equipo francés desafiante en la 37ª Copa América Barcelona 2024, reconoce que, «es una lástima que no haya un equipo español, aunque me gustaría que se nos considerase como el equipo 'local'». Nacido de padre alemán y madre francesa, creó, junto a su padre Ortwin, en 2001 el equipo K-Challenge para competir en la 32ª Copa del América en Valencia 2007. Con solo 30 años Stephan un apasionado de la vela, llevó a su equipo a Gandía para preparar la Copa y su relación con la ciudad provocó que los medios de comunicación denominasen al equipo Gandía Challenge. Fue un equipo modesto, que compitió como Areva Challenge (nombre de su patrocinador),pero que se ganó el aprecio de los aficionados y los medios, siendo, junto al Desafío Español Iberdrola, el más seguido. Además tuvo como director deportivo del equipo a la legendaria navegante estadounidense Dawn Riley, algo inédito en ese momento. Kandler siguió con otros proyectos y éxitos en la vela de alta competición hasta que en 2013, sin posibilidad de tener un equipo francés de Copa del América y ,especialmente, por la muerte de su padre paso a dirigir los negocios familiares, incluido el viñedo Château Tourril en Languedoc y adquirió un segundo viñedo, Domaine des Pentelines, en el valle del Ródano; sus vinos tienen reconocido prestigio mundial. En 2021 se asoció con Bruno Dubois, otro de los 'grandes' de la vela francesa, para promover un nuevo desafío francés de Copa América, que se presentó oficialmente el 2 de febrero de 2023, tras lograr el patrocinio principal del grupo hotelero Accor y denominarlo Orient Express Racing Team. En julio de 2023 el equipo llegó a su base de Barcelona, situada en un extremo del Moll de Ponent, bajo el puente de la Puerta de Europa y lo hizo con solo una carpa y varios contenedores. Ahora ya cuenta además con un edificio funcional de dos plantas, sala de simuladores y con 115 miembros (25 tripulantes y 50 constructores). La vela es su pasión y por esto asegura que, «iniciar un proyecto francés en esta edición pareció ser una idea 'loca'. Ahora, en 2024 estamos orgullosos de lo que hemos conseguido, mucho más de lo esperado, y hoy el nivel del equipo está en un importante progreso». «Hemos conseguido el patrocinio de marcas francesas emblemáticas de gran prestigio mundial como Accor, All.com, L'Oreal o Alpine por poner un ejemplo y por esto hemos superado las expectativas con que empezamos hace tres años .Además tanto la Federación Francesa como el gobierno de nuestro país, encabezado por su presidente, Emmanuel Macron se ha volcado con nosotros» , revela Kandler Su opinión es que «tenemos un equipo más maduro que el de 2007 aunque no hemos olvidado que fuimos el último en llegar a Barcelona cuando el resto ya llevaban ya un año aquí. Estoy convencido que tener una tripulación joven como la nuestra, con experiencia en el Circuito Mundial SailGP, será una ventaja en esta edición». El retraso de la llegada del equipo provocó que no pudiese preparar a tiempo un diseño del AC75 (monocasco con 'foils' de 11,90 metros de eslora). «Esa fue mi primera preocupación, así que el objetivo fue adquirir un paquete de diseño de un equipo. Desde 2003 mantenemos una estrecha relación con Grant Dalton y ya trabajamos juntos en el 2007, así que se lo adquirimos al Team New Zealand. Para Dalton era importante tener un sexto equipo. Era importante para él y también para nosotros y para Barcelona« . Von el AC75 construyéndose en Vannes (Francia) y con el AC40-LEQ12 (monocasco de pruebas) ya navegando en Barcelona, él opinó que, «ya estamos en los mismos de los plazos de preparación que el resto de equipos y con buena dinámica». Uno de los grandes 'cerebros' de la vela mundial de alta competición, el ingeniero francés Benjamín Muyl, que en 2007 ya estuvo en el K-Challenge y que pasó por varios equipos de la Copa, es el jefe de diseño e ingeniería. Dirige la construcción del AC75 y ha construido los simuladores del AC40 y del AC75, todos con tecnología francesa y que utiliza el equipo para entrenar. «Los ingenieros franceses son los que están más presentes en los equipos de Copa. Solo hay que mirar los diseños y tecnologías de la Vendée Globe, los multicascos, etc. Es una tradición francesa aunque estos barcos de esta edición son 'aviones', son tecnología aeroespacial y esa es la razón de lo complicado de su diseño» . «Sin haber contado con el paquete de diseño del Team New Zealand no hubiésemos estado en Barcelona. Lo que estamos haciendo ahora es desarrollar nuestro AC75 con este punto de partida ya que es imposible aspirar a ganar la Copa América sin una buena tecnología y tenemos buena tecnología y un gran equipo de desarrollo» , reconoce. Lamentó nuevamente el que no haya un desafío español absoluto en esta edición, pero destacó que «es muy importante que hay un equipo Joven y uno Femenino, ya que es un oportunidad de construir proyectos y tripulantes de futuro». «En nuestro caso esta fue una de las razones por las que los patrocinadores que tenemos están con nosotros: es la primera vez que en un evento deportivo se da la misma visibilidad a los tres pilares de la Copa: los equipos absolutos, los jóvenes y los femeninos; todo esto va a aportar nuevas audiencias» , incide. «La aparición de talentos jóvenes, como el italiano de 19 años Marco Gradoni, representa ya un cambió de generación en nuestro deporte, tanto en tecnología como en sostenibilidad». Es optimista en el hecho de que su equipo puede plantar clara a los 'grandes' de esta edición. «No somos ambiciosos, pero nuestro proyecto está bien planteado, hemos sabido superar las dificultades que tuvimos al principio y encontrar soluciones». Tanto en el diseño como en la tripulación tenemos un equipo 'fresco' y eso es importante porque si debemos competir con equipos que llevan años trabajando juntos lo que tenemos que hacer son cosas diferentes« . Respecto a esto desvela que, «nuestro objetivo es que K-Challenge, la tecnología deportiva líder en el mundo, continúe después de la Copa. Actualmente estamos trabajando en varias tecnologías, incluida la simulación digital, que podríamos aplicar a otros campos, como el barco con 'foils' de hidrógeno que estamos diseñando». «Nuestra ambición es contribuir a hacer más competitiva la industria francesa y Accor también ha invertido en la filial K-Challenge Labs con este objetivo, no solo para la Copa América, sino también para fines comerciales» , concluye.

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