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<img align="left" src="https://static3.abc.es/media/deportes/2022/01/24/canarias-kqZE--620x349@abc.jpeg">Desde octubre el equipo preolímpico de la clase Ilca 6, que dirige el entrenador nacional Jano Toro (La Coruña, 1986), tiene su sede en el Centro Canario de Vela Manolo Pazos Díaz de la Federación Canaria de Vela (FCV).
Para el técnico de la Real Federación Española de Vela, esta es la segunda estancia de trabajo en Gran Canaria. En 2017 el equipo preolímpico de Ilca 7 (la embarcación masculina), estaba integrado por los grancanarios Joquín Blanco (olímpico en Río 2015) y Joel Rodríguez (que sería olímpico en Tokio 2020), y se pensó que cuanto más cerca de casa, mejor.
“Entrenar en casa es una ventaja, ese fue el principal motivo entonces. Pero encima llegas aquí y descubres que tienes buen clima en invierno, viento todo el año y a la Federación Canaria y al Real Club Náutico de Gran Canaria, que ayudan en todo lo que pueden. Hemos entrenado también en Lanzarote y en Tenerife, y cada isla tiene sus cosas, todas son buenas para navegar y siempre hay un enamorado de la vela dispuesto a echar una mano. En Canarias las condiciones son espectaculares y la acogida también”.
En estos momentos, el objetivo más inmediato de Toro es el Trofeo Princesa Sofía, que celebra su 51 edición en abril; el último, los JJOO París 2024. El técnico subraya una circunstancia clave que ha motivado la pandemia: este ciclo olímpico tiene un año menos.
Los resultados del mundial oficioso de la vela olímpica en Mallorca servirán o no para recomponer el equipo, que ahora mismo está integrado por la olímpica catalana Cristina Pujol, la malagueña Ana Moncada y la juvenil grancanaria Isabel Hernández.
La regatista isleña Martina Reino completa el equipo de trabajo que todos los días sale al agua en la bahía de Las Palmas de Gran Canaria tras una pequeña reunión en la sede de la FCV. Las tardes se reservan para la preparación física.
“Lo principal ahora es entrenar, recuperar la constancia, porque venimos de un periodo limitado por la pandemia”, señala el entrenador que destaca el “buen nivel” del equipo preolímpico de la clase Ilca 6 para este 1er ciclo olímpico. “Estamos por encima de la mitad de la tabla sobradamente; en ‘el Sofía’ veremos dónde”.
La cabeza de serie es Cristina Pujol (San Cugat del Vallés, 1993). La catalana representó a España en Tokio 2021 y en el Mundial de Mussanah (Omán) , celebrado en diciembre de 2021, acabó en el top 10, “un resultado fantástico, el mejor en cuatro o cinco años”, en palabras de su entrenador.
Jano Toro pertenece a una familia de tradición deportiva que se inicia con los abuelos, continúa con los padres y se materializa, por ahora, en la actual generación con un entrenador nacional de vela y una medallista olímpica. Sofía, hermana pequeña de Jano, ganó una medalla de oro en la clase Match Race en los JJOO de Londres 2012.
Criado en el Real Club Náutico de La Coruña, donde navegó en Optimist y en la entonces clase Laser (hoy Ilca), estudió Educación Física y descubrió que le gustaba entrenar a otros. Empezó en su club y los buenos resultados que obtuvo hicieron que un día recibiera la llamada de la RFEV.
“A veces, en la típica conversación de café, nos decíamos: ‘en Canarias son la leche’, y nos preguntábamos por el secreto del impresionante palmarés de la vela de las islas, porque en muchos clubes de España se hace un trabajo muy bueno también. La diferencia es que aquí hay unas condiciones de viento, de temperatura y de sol que animan a todo el mundo a tirarse al agua. Y esto se reatroalimenta: si hay buenos regatistas, hay buenos entrenadores”.
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Para el técnico de la Real Federación Española de Vela, esta es la segunda estancia de trabajo en Gran Canaria. En 2017 el equipo preolímpico de Ilca 7 (la embarcación masculina), estaba integrado por los grancanarios Joquín Blanco (olímpico en Río 2015) y Joel Rodríguez (que sería olímpico en Tokio 2020), y se pensó que cuanto más cerca de casa, mejor.
“Entrenar en casa es una ventaja, ese fue el principal motivo entonces. Pero encima llegas aquí y descubres que tienes buen clima en invierno, viento todo el año y a la Federación Canaria y al Real Club Náutico de Gran Canaria, que ayudan en todo lo que pueden. Hemos entrenado también en Lanzarote y en Tenerife, y cada isla tiene sus cosas, todas son buenas para navegar y siempre hay un enamorado de la vela dispuesto a echar una mano. En Canarias las condiciones son espectaculares y la acogida también”.
En estos momentos, el objetivo más inmediato de Toro es el Trofeo Princesa Sofía, que celebra su 51 edición en abril; el último, los JJOO París 2024. El técnico subraya una circunstancia clave que ha motivado la pandemia: este ciclo olímpico tiene un año menos.
Los resultados del mundial oficioso de la vela olímpica en Mallorca servirán o no para recomponer el equipo, que ahora mismo está integrado por la olímpica catalana Cristina Pujol, la malagueña Ana Moncada y la juvenil grancanaria Isabel Hernández.
La regatista isleña Martina Reino completa el equipo de trabajo que todos los días sale al agua en la bahía de Las Palmas de Gran Canaria tras una pequeña reunión en la sede de la FCV. Las tardes se reservan para la preparación física.
“Lo principal ahora es entrenar, recuperar la constancia, porque venimos de un periodo limitado por la pandemia”, señala el entrenador que destaca el “buen nivel” del equipo preolímpico de la clase Ilca 6 para este 1er ciclo olímpico. “Estamos por encima de la mitad de la tabla sobradamente; en ‘el Sofía’ veremos dónde”.
La cabeza de serie es Cristina Pujol (San Cugat del Vallés, 1993). La catalana representó a España en Tokio 2021 y en el Mundial de Mussanah (Omán) , celebrado en diciembre de 2021, acabó en el top 10, “un resultado fantástico, el mejor en cuatro o cinco años”, en palabras de su entrenador.
Jano Toro pertenece a una familia de tradición deportiva que se inicia con los abuelos, continúa con los padres y se materializa, por ahora, en la actual generación con un entrenador nacional de vela y una medallista olímpica. Sofía, hermana pequeña de Jano, ganó una medalla de oro en la clase Match Race en los JJOO de Londres 2012.
Criado en el Real Club Náutico de La Coruña, donde navegó en Optimist y en la entonces clase Laser (hoy Ilca), estudió Educación Física y descubrió que le gustaba entrenar a otros. Empezó en su club y los buenos resultados que obtuvo hicieron que un día recibiera la llamada de la RFEV.
“A veces, en la típica conversación de café, nos decíamos: ‘en Canarias son la leche’, y nos preguntábamos por el secreto del impresionante palmarés de la vela de las islas, porque en muchos clubes de España se hace un trabajo muy bueno también. La diferencia es que aquí hay unas condiciones de viento, de temperatura y de sol que animan a todo el mundo a tirarse al agua. Y esto se reatroalimenta: si hay buenos regatistas, hay buenos entrenadores”.
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